La calefacción tardó en encenderse, estaba fría.

La habitación era amplia y el baño estaba reformado, todo muy limpio. Me sentí muy cómoda y pude descansar bien, lo que fue esencial para disfrutar mi estancia y explorar Ágreda con energía.

Mejorar la calefacción en las habitaciones sería ideal.

La amabilidad del personal fue impresionante, siempre dispuestos a ayudar y hacer que nuestra estancia fuera más agradable.

El desayuno fue caro en comparación con lo que ofrecían, además de que el pan estaba un poco seco.

La habitación era grande y el baño estaba reformado, todo muy limpio.

Al llegar, las habitaciones estaban heladas porque no tenían encendida la calefacción. Tuvimos que quejarnos para que la pusieran en marcha, lo cual fue incómodo. Además, el desayuno fue excesivamente caro por la calidad de la comida que recibimos.

La habitación era amplia y agradable, además el baño estaba reformado y todo muy limpio. El menú del día en el restaurante me sorprendió positivamente, con platos bien elaborados. Sin embargo, el restaurante necesita una actualización y no había aire acondicionado, lo que afectó un poco la comodidad.

buen servicio y comodidad

El personal fue muy amable y siempre dispuesto a ayudarme. Disfruté de la comodidad de los colchones y las almohadas, lo que hizo que mis noches fueran placenteras. La vista de las montañas era un gran plus, aportando belleza al entorno.

Los precios de la comida en el restaurante son un poco elevados.

El restaurante ofrece cenas temáticas que son muy entretenidas. Las habitaciones necesitan una actualización. estaban un poco descuidadas y frías.

El lugar es fácil de encontrar, cuenta con un parking amplio y un restaurante que no está nada mal.

Las habitaciones son viejas. parece que el tiempo se olvidó de ellas, como yo cuando intenté abrir la ventana.

La habitación era grande y el baño estaba reformado, todo muy limpio. Los colchones y almohadas eran cómodos, así que pude descansar bien. El personal fue amable, pero el trato podría ser un poco más cercano. El lugar está un poco anticuado y no hay ascensor, lo que es un inconveniente. Un detalle a tener en cuenta es que el desayuno no estaba incluido y me pareció un poco caro.

El personal fue súper acogedor y la comida del restaurante estuvo increíble. Me encantó la amplitud de la habitación y que estaba todo impecable.

La calefacción tardó en encenderse y algunos detalles podrían actualizarse.

La habitación era grande y el baño estaba reformado, todo muy limpio. Las camas eran comodísimas y me permitió descansar bien. La calefacción, sin embargo, tardó un poco en encenderse, lo que hizo que llegáramos a unas habitaciones heladas. A pesar de eso, el personal se mostró atento y dispuesto a ayudarnos. El restaurante tenía un menú del día que sorprendió, con platos bien elaborados, aunque los precios de la comida son un poco elevados en comparación con otros lugares que visité en Ágreda. El desayuno tampoco me convenció, me pareció caro en relación a lo que ofrecían. La ubicación es conveniente, ya que está a diez minutos caminando del centro y hay un parque bonito cerca. Aunque el lugar necesita una actualización, en general, fue una estancia agradable y volvería si resolvían algunos detalles.

Experiencia encantadora con un toque especial

El menú de bacalao fue excepcional, con seis platos sorprendentes. Los postres destacaron, especialmente el de chocolate. Aunque el restaurante necesita una actualización, la limpieza y la atención del personal hicieron la experiencia aún mejor. Recuerda preguntar por la calefacción si llegas en invierno.